La cita era el diecinueve de noviembre en Libertad 8, el mítico café que tanto tiene que decir en el panorama literario de la capital. Nieves Álvarez, Juan José Alcolea y Ana Garrido convocaban, bajo el sugerente título de “Letras Desnudas”, a una lectura compartida de sus tres últimos libros publicados.
Leyeron alternativa, suicida, felizmente, degustando el momento y la palabra. Nieves abrió el fuego estremeciéndonos con varios poemas de su “Desde todos los nombres”. La madre que llora al hijo, miradas que no vuelven, la injusticia. Después Juan José Alcolea, travestido para la ocasión, escogió alguno de los poemas de los “Calendarios Dispares”, escritos en colaboración con Ana Garrido. Esta última, al cabo, ofreció una selección de su “Noticia del Asombro”. Después, con la piel en la herida de los labios, algún inédito, algún poema improvisado que Nieves se atrevió a regalarnos y un fin de fiesta con Juanjo en pie, entre el público, con una flor prendida al lado izquierdo.
Fue una tarde mágica, de vida compartida a flor de verso, de emoción en abrigo. Pocas veces ha podido vivirse tanta dicha, pocas veces se nos ha dado el agua en tanto fuego. Desde aquí queremos dar especialmente las gracias a quienes nos acompañaron, a quienes pusieron su calor, su magia, para hacerla posible. Hortensia Higuero, Celsa Blanco, Mary Santos Caballero, Concha García de los Arcos, Carmen Fabre, Laura Gómez Recas, María Isabel Ruano Morcuende y Teresa Núñez. A todos, gracias por ser, por estar.
Ana Garrido
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